Así lo expresó el rector de la UNSJ, Tadeo Berenguer, a quienes egresaron de la Escuela Universitaria de Ciencias de la Salud.
En horas de la tarde del 7 de octubre se realizó el último
acto de colación de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) del ciclo 2024.
En esta oportunidad la Escuela Universitaria de Ciencias de la Salud (EUCS) fue
la que entregó títulos de Licenciatura en Enfermería y Enfermería Universitaria
a un total de 111 graduados/as.
En una primera instancia y para dar el toque festivo al
acto, actuó el Coro de Niños y Jóvenes de la UNSJ dirigido por Jorge Fuentes,
quienes además de interpretar 3 obras musicales infantiles con gran simpatía y
talento, también y después del ingreso de la Bandera de ceremonia de la EUCS
entonaron el Himno Nacional Argentino.
Luego se expresaron los diferentes discursos en nombre de
egresados/as, docentes, de la unidad académica y de la Universidad.
Representando a los/as egresados/as habló la licenciada en Enfermería Maira
Elizabeth Pérez Chandía, quien principalmente agradeció a quienes contribuyeron
para que recibieran este merecido logro. Luego reconoció que esta meta
conseguida se debe a sus propias “energías atómicas de la voluntad”, “es un
premio a nuestros esfuerzos y perseverancia”.
Posteriormente y en representación de docentes habló el
médico Sebastián Molina, quien recordó los inicios, las dudas y los sueños de
los egresados, e hizo hincapié en haber sido “testigo de su dedicación y sus
esfuerzos pero principalmente de su transformación en profesionales
comprometidos y apasionados”. Luego los instó a recordar que “en cada paciente
hay una historia, una vida que confía en ustedes, su capacidad para empatizar,
para ofrecer un abrazo en un momento adecuado o simplemente para estar
presentes, es lo que marcará la diferencia”.
En representación de la EUCS, habló el director Ángel
Pinto, quien inició su discurso diciendo: “Ser enfermero no es sólo una
profesión; es una vocación, un llamado a servir y cuidar de los demás en sus
momentos más vulnerables”. Continuó expresando que “a partir de hoy, llevarán
el título de Enfermeros y Licenciados en Enfermería, pero también llevarán la
responsabilidad de ser defensores de la salud, educadores y, sobre todo,
portadores de esperanza”. Además, hizo hincapié en la situación de la educación
universitaria: “Actualmente parece
fácil cuestionar el valor de la educación superior y la labor de nuestras
instituciones. Sin embargo, es precisamente en estos momentos cuando debemos
recordar y reafirmar nuestro más alto compromiso con la excelencia académica y
el servicio a la comunidad”.
Finalmente fue el
rector Tadeo Berenguer quien cerró la ronda de oradores. “La graduación es un
mérito personal pero también es el resultado de un esfuerzo colectivo, que
incluye familia, compañeros/as y las instituciones educativas. Esto es el fruto
de un trabajo en equipo”. También hizo referencia a la empatía: “En la
enfermería es una de las cualidades más importantes, esta conexión emocional es
lo que distingue a un buen enfermero de uno excepcional”. Además, pidió brindar
una atención de calidad a pacientes: “Vuestro compromiso no es sólo una
formalidad, sino es un compromiso moral y ético de poner la vida y el bienestar
de sus pacientes por encima de todo”. Finalmente hizo también referencia a la
Educación Superior: “La Educación es uno de los pilares fundamentales de la
sociedad y sin ella sería imposible obtener niveles elevados de progreso que
permitan la vida digna del ser humano”.
Y antes de la entrega de los diplomas se realizó la
distinción a los mejores promedios de la colación, además de nombrar al nuevo Cuerpo
de Bandera que recibirá la insignia en el acto de cambio de Bandera que se
realizará este miércoles 9 de octubre en el Edificio Central de la UNSJ.